En pocos lugares de EE. UU., los perros son tan bienvenidos como en California. Con su clima apacible, sus espacios abiertos y sus ciudades acogedoras, el estado dorado es un paraíso terrenal para los perros y el principal de sus encantos son los 1352 kilómetros de línea costera en el Pacífico. Desde San Diego hasta la Costa Norte, muchas playas californianas están abiertas a los perros que estén listos para correr por las arenas y juguetear en las olas con desenfreno jovial. Si explora California con una compañía peluda, no se pierda estas ocho playas aptas para perros, que se mencionan de sur a norte.
Dog Beach, San Diego
La línea costera apta para perros no puede ser mejor que este lugar emblemático en Ocean Beach, donde se reciben perros y sus dueños desde hace más de 40 años. En la actualidad, la amplia franja de arena en el lugar donde el Río San Diego desemboca en el Pacífico está siempre repleta de perros que corren por los bajíos y se recuestan al sol. Llegue temprano para encontrar estacionamiento, luego, aproveche el día: desde la playa, puede ir caminando al OB Pier, Dog Beach Dog Wash y a cervecerías en Newport Avenue, como Helm’s, Culture y Belching Beaver, donde hay cervezas frías y los perros son bienvenidos.
Dog Beach, Del Mar
North Beach, en Del Mar, tiene todas las características de un parque de juegos para perros: una playa amplia, bancos de arena poco profundos y hermosas construcciones protegidas de los vientos y las grandes olas. Las apacibles aguas son una zona de chapoteo para niños y perros, que pueden entrar durante todo el año, pero deben tener correa desde el 16 de junio hasta el Día del Trabajo. Para los caninos que cortan las olas, el Helen Woodward Animal Center organiza el Surf Dog Surf-A-Thon en otoño junto con clases de surf y paddleboard durante el verano. Inscriba a su perro en línea, luego, espere la clase con un sándwich gigante en el patio apto para perros de Board & Brew.
Dog Beach, Huntington Beach
Gran parte de la soleada costa del sur de California en Huntington Beach no es apta para caninos, pero esta franja de 2,4 kilómetros entre las calles Goldenwest y Seapoint está dedicada a los perros. Con una extensión llana de arena y mucho espacio para estirarse, los cachorros pueden jugar tanto como deseen y socializar tanto, o tan poco, como quieran. Los dueños de perros Corgi deben consultar el calendario para conocer los días de reunión de So-Cal Corgi Nation y todos disfrutarán de ver cómo los perros montan las olas durante la competencia anual Surf City Surf Dog.
Rosie’s Dog Beach, Long Beach
Rosie's, la única playa realmente para perros, en el condado de L.A. es una fiesta para juguetear de 1,6 hectáreas donde los cachorros zigzaguean por las olas y disfrutan de la arena sin correa. Este destino en Long Beach es también popular para las familias por sus aguas calmas y ubicación accesible. Además, se llena durante los fines de semana soleados, en los que el estacionamiento puede ser un lujo. Traiga monedas para los parquímetros, una toalla para su cachorro y apetito para disfrutar en Plunge, que acepta perros y donde los burritos de desayuno esperan a poca distancia de la playa.
Surfers’ Point en Seaside Park, Ventura
En esta playa al norte de Ventura Pier, la cual se trata menos de echarse al sol que de mirar cómo los surfistas atraviesan las olas, es una de las favoritas de los lugareños que pasean perros con correas por el malecón y disfrutan del espectáculo desde la costa. Si necesita un refresco después de la caminata, a 800 metros, Barrelhouse 101, toma su nombre de las 101 tipos de cervezas de barril. Tome asiento en el patio cerrado, donde los cachorros son bienvenidos, y disfrute de una degustación de vinos o cervezas junto con contundentes porciones de comida de pub.
Arroyo Burro Beach, Santa Bárbara
Conocida por los lugareños como Hendry’s Beach, esta franja de arena a 10 minutos al oeste del centro de Santa Bárbara ofrece más que la condición de tener arena, sol y surf. En lugar de eso, Arroyo Burro, que se encuentra detrás de un farallón, cuenta con zonas para animales tímidos y extrovertidos con correa y sin correa, pozas de marea rocosas para explorar y un lugar de autoservicio para bañar a su perro así no tiene que subir al auto a su perro sucio. Si a su compañero que mueve la cola le viene bien un poco más de ejercicio, la Douglas Family Preserve, en la cima de los acantilados, ofrece 28,4 hectáreas de espacio abierto apto para perros que también es popular entre los senderistas, ciclistas y aladeltistas.
Carmel Beach, Carmel-By-The Sea
¿Qué tipo de pueblo recibe a los perros en sus excelentes construcciones sobre la costa? Carmel-By-The-Sea, donde los caninos pueden correr y chapotear siguiendo las órdenes a lo largo de Carmel Beach. Los cachorros y sus dueños comparten las aguas turquesas con los surfistas, bañistas y con quienes observan el atardecer, que inundan la playa con botellas de vino y canastas de picnic. Cuando no esté jugando en el Pacífico, camine por los farallones en Scenic Path o recorra el poblado, donde los perros contonean por las calles pintorescas y son visitantes bienvenidos en muchas tiendas, restaurantes y hoteles. Vaya a Cottage of Sweets y compre las especiales galletas. Se portó muy bien.
Fort Funston, San Francisco
Para los turistas con perros que visitan San Francisco, Fort Funston es la meca de la diversión sin correa. Aquí, los cachorros corren por las grandes dunas de la península antes de atravesar empinados senderos hacia una amplia playa en el Pacífico resguardada por farallones de 61 metros. Con perro o sin perro, esta instalación de defensa desmantelada es un impresionante lugar para dar una caminata (sin mencionar que es un destino estelar del aladeltismo). Las olas son demasiado frías y bruscas para nadar, pero la costa normalmente está repleta de animales felices que chapotean en el agua, juegan con arena y se preparan para el inevitable baño.
Rodeo Beach, Sausalito
Ubicada en una ensenada frente al Puente Golden Gate en San Francisco, esta pequeña playa de guijarros en Sausalito parece un regalo: tiene mucho espacio de estacionamiento gratuito, lugares para hacer picnics, su política de perros sin correa y su imponente paisaje delimitado por una laguna en la parte de atrás y acantilados a ambos lados. Comience con una caminata en subida que le quemará las piernas y, a su vez, le regalará vistas panorámicas de Marin Headlands y la Bahía de San Francisco. Más adelante, regrese a la playa mientras su amigo peludo chapotea en los bajíos y los surfistas, con sus trajes de neopreno, hacen equilibrio sobre las olas. Esté atento a los delfines y a sus bocadillos: las gaviotas son ladronas hábiles.
Kiva Beach, Lake Tahoe
Ubicada en un Bosque Nacional a una corta caminata del centro para visitantes, Kiva representa una imagen idílica de los encantos de Tahoe, con agua cristalina, abundante arena e imponentes montañas que se elevan el fondo. También, es una de las pocas playas aptas para perros del lago. Si bien solo se puede estar en la costa y en el agua con correa (y los guardaparques suelen hacer cumplir las reglas), encontrará muchos cachorros refrescándose en los bajíos o recostándose en la tierra. Cuando sea momento de terminar el día, visite el Camp Richardson Ice Cream Parlor, donde las bolas de helado son muy generosas.
Moonstone Beach, Trinidad
Lo que la Costa Norte de California no tiene en cuanto a costas empapadas de sol y repletas de bikinis, lo compensa con hermosos lugares perfectos para la aventura. Un ejemplo es Moonstone Beach, en el condado de Humboldt, una playa en la boca del Little River, donde los escaladores suben por los acantilados, los niños exploran las cuevas marinas, los surfistas bailan sobre olas estables y los perros corren por el agua respetando las órdenes de sus dueños. Disfrute de navajas a la vera del río, observe el atardecer sobre el océano y maravíllese con la implacable belleza de California.