Con extensas playas y algunas de las mejores rompientes en alta mar del mundo, Santa Cruz es famosa por su cultura del surf de alto riesgo. Pero hay mucho más en esta tranquila franja de costa que trajes de neopreno y tablas cortas. A poca distancia de San José y San Francisco, Santa Cruz es la escapada de fin de semana perfecta, aunque una vez que haya probado el encanto ecléctico y la belleza natural de la zona, es posible que nunca quiera irse.
Viva el lujo relajado en el Dream Inn
Quedarse cerca de la playa siempre es buena idea y no podrá estar mucho más cerca que en Dream Inn. Construido en el sitio de la primera tienda de Jack O'Neill, este hotel de la década de 1960 se encuentra a pocos pasos de Cowell Beach. Las 165 habitaciones, todas con vista al mar y balcones privados o patios, tienen estilo playero elegante gracias a una decoración colorida inspirada en el surf. Dese un chapuzón en la piscina climatizada frente a la playa y escuche las olas que rompen mientras flota en el agua a 29 grados centígrados. Observe la puesta del sol a través de los ventanales en el Jack O'Neill Restaurant ubicado en el hotel, que sirve mariscos locales y comida elaborada con ingredientes de la granja a la mesa.
Disfrute de una aventura de animales en el mar
Para una perspectiva completamente nueva de la vida marina de la bahía de Monterrey, alquile una embarcación en Venture Quest Kayaking y reme desde la costa. Flotará cerca de lobos marinos que toman sol en afloramientos rocosos mientras los pelícanos se arremolinan en lo alto. Esté atento a las aletas de los delfines, las nutrias que brincan y las cabezas de las focas que emergen del oleaje. Reserve una excursión guiada para explorar las cuevas marinas en el Parque Estatal Wilder Ranch u observe de cerca las ballenas grises de 15 metros de largo durante la temporada de migración (de marzo a mayo).
Conozca la historia de los surfistas
Cuenta la leyenda que el surf llegó por primera vez a los Estados Unidos cuando un trío de príncipes hawaianos remaba en Santa Cruz. El Santa Cruz Surfing Museum rinde homenaje a la historia cowabunga de la ciudad con artefactos poco convencionales, fotografías y muchas tablas de la vieja escuela. Una vez que descubra lo que Burt Landess usó por primera vez para una tabla (pista: también puede usarla para planchar), salga para ver cómo la historia cobra vida. Dé un paseo por Lighthouse Point y verá decenas de temerarios que se deslizan por el rompiente en Steamer Lane.
Diviértase en una montaña rusa de madera
Construida en 1907 como “Coney Island of the West (isla Coney del Oeste)”, el Santa Cruz Beach Boardwalk es una prueba de que un parque de diversiones junto al mar nunca pasa de moda. Sienta cómo el aire salado azota su cabello en el Double Shot que revuelve el estómgo o en la Giant Dipper, una atronadora montaña rusa de madera con una caída de 21 metros. A los jinetes, les encantará el Looff Carousel, que cuenta con pelo de caballo real y un órgano de 342 tubos. Deléitese con un bocadillo clásico de carnaval y pruebe suerte en un juego de arcade antes de dar un paseo por el embarcadero.
Caminata entre gigantes
Diríjase hacia el norte por la ruta 9 del estado de California para explorar un lado totalmente diferente del condado de Santa Cruz. Un corto viaje de 32 kilómetros lo llevará desde playas de arena hasta bosques de secuoyas con sombra. El Parque Estatal Big Basin Redwoods, ubicado en Boulder Creek, ofrece fácil acceso a estos antiguos gigantes. Realice la caminata de ida y vuelta de 5,4 kilómetros a Sempervirens Falls. En el camino, verá secuoyas de 91 metros de altura, abetos de Douglas, helechos de cinco dedos y, tal vez, una babosa de plátano o dos, antes de llegar a las cataratas salidas directamente de un cuento de hadas.