Escale en una vía ferrata. Bucee dentro de una jaula con tiburones. Escápese a un rancho turístico o súbase a un banco de arena en el desierto. Estas y otras aventuras inesperadas lo esperan en el estado dorado.
1. Escápese a un rancho turístico
Desempolve su sombrero Stetson y muestre la hebilla plateada para reconectarse con la cultura distendida de los vaqueros de California. Pasee a caballo a través de pinos y cedros en el Greenhorn Ranch de Quincy. Aprenda a tirar una cuerda como un vaquero en The Alisal Guest Ranch cerca de Solvang. Recorra un emocionante camino de manejo de ganado en Hunewill Ranch de Bridgeport. ¿Nunca se subió a un caballo? Los más urbanos pueden elegir actividades que no se realizan arriba de un caballo, como pesca con mosca, rafting en el río, hacer natación o una fogata con s’mores bajo el cielo estrellado.
2. Deslícese por una duna
La nieve se derrite y las olas se calman, pero los médanos de la costa siempre están listos para la acción. Encere su sandboard, átelo a sus pies y deslícese por las suaves pendientes gastadas por el viento. Las dunas de la costa se forman cuando la brisa del océano apila arena, como las grandes formaciones de arena en la Playa Estatal de Marina, las escarpadas paredes de “The Crater” en Sand City o las Oceano Dunes al sur de Pismo Beach. En el invierno, pruebe hacer sandboarding en el desierto en Kelso Dunes en la Reserva Nacional Mojave o Mesquite Flat Sand Dunes en el Parque Nacional Death Valley. Traiga a sus hijos: los más jóvenes son lo suficientemente livianos para deslizarse en trineos o platillos de plástico.
3. Bucee con tiburones
En un viaje con Cage Diver San Francisco, es posible sentir cómo late su corazón al encontrarse con los enormes animales blancos. Comenzará con un viaje de tres horas en barco hasta la Isla Los Farallones, luego, descenderá dentro de una jaula de metal y esperará a que aparezca un tiburón de 4,6 metros. Para encontrarse a otros predadores, reserve con California Shark Diving en Los Ángeles o San Diego. Es una buena oportunidad para ver tiburones mako, azul o martillo desde una jaula segura bajo del agua.
4. Pasee por el viento y las olas
Pocos deportes son tan hermosos a la vista como el kitesurfing. Los temerarios atletas controlan el viento y las olas mientras recorren el océano a 48 kilómetros por hora, impulsados por una cometa de tracción. Conozca las ventajas de hacer vueltas y giros deslumbrantes en Jalama Beach cerca de Lompoc, Arroyo Laguna en San Simeón, Crissy Field en San Francisco o Waddell Creek en Davenport. ¿Quiere sumarse al grupo? Asista a las clases en Belmont Shore en Long Beach, Bahía de la Misión en San Diego, Coyote Point en San Francisco o Sherman Island en Río Vista.
5. Escale con confianza
¿Tiene ganas de un desafío? Abandone la rutina de levantarse y darlo todo a una de levantarse y escalar. No necesita tener un equipo ni habilidades especiales, solo el deseo de evaluar su propio desempeño en una roca vertical. Las vías ferratas son lugares para escalar con protección: usted puede escalar a su ritmo mientras lo sostienen equipos con cables y amarres de acero. Los peldaños y puntos de apoyo de hierro lo ayudan a ascender y lo acompaña un guía con experiencia. Ábrase camino a través de Tram Face de 244 metros en Palisades Tahoe Resort o elija uno de los seis caminos diferentes en Mamooth Mountain.
6. Recorra las profundidades del océano
No hay nada como sentir que se le sube la adrenalina al pescar un atún de 90 kilos difícil de sacar. A lo largo de la costa de California, los chárter náuticos rebuscan entre las aguas profundas del mar para encontrar peces de caza que hacen que se doblen las cañas de pescar. Desde Fort Bragg, Bodega Bay o Half Moon Bay, pruebe su suerte en busca de un salmón o un pez de roca. Pesque una corvina blanca en Ventura o Morro Bay, enganche con el anzuelo un lenguado californiano o una cabrilla sargacera cerca de Santa Bárbara. En las aguas templadas entre Newport Beach y San Diego, pesque un atún común o un jurel.
7. Navegue las aguas en una casa flotante
Las vacaciones de verano presentan un dilema: hay muchos deportes de agua y muy poco tiempo. Una casa flotante resuelve el problema: son lo suficientemente grandes para llevar kayaks, tablas de paddleboard, equipos de pesca y juegos de agua de todas las formas y todos los tamaños, y usted puede nadar alrededor de la parte trasera. Estas casas flotantes de alquiler tienen varias camas para acomodar a toda la familia y son realmente fáciles de manejar, incluso si usted nunca ha tenido un barco. Alquile una en Trinity Lake o en el Lago Shasta cerca de Redding; Lago Don Pedro en las laderas de Sierra o Lake Berryessa en el condado de Napa.
8. Haga una travesía por las copas de los árboles
Gracias a la tirolesa que cruza las secuoyas, podrá conocer el fantástico ecosistema que crece con fuerza a más de 30 metros sobre la superficie del bosque. Forme parte de este mundo no tan conocido mientras camina, se cuelga y remonta vuelo desde una plataforma pasando por puentes en suspensión, giros aéreos y tirolesas. Combine su camino con una estadía en una casa del árbol en Sonoma Zipline Adventures en Occidental o reúna a sus compañeros de trabajo para trabajar en equipo en Mount Hermon Adventures en Felton.