Los misioneros españoles plantaron los primeros olivos de California a finales del siglo XVIII en las misiones desde Sonoma a San Diego. No fue intervención divina; los expertos padres sabían que el clima cálido y soleado de California, similar al de las regiones productoras de aceitunas de España. Francia e Italia, era ideal para cultivar aceitunas. Para mediados del siglo XIX, California tenía una próspera industria de aceite de oliva que había llevado a la aparición de salas de degustación de aceite de oliva en todo el Estado.
California representa 99 por ciento de toda la producción de aceite de oliva de EE. UU. y se ha ganado una reputación como productor de clase mundial. Al menos 75 variedades diferentes de aceitunas florecen en los microclimas del Estado, lo que ofrece a los productores una rica selección de perfiles de sabor. “Esta creciente selección de variedades de aceitunas ofrece un espectro de aceites y mezclas de marca registrada únicas de California”, afirma Lisa Pollack del California Olive Oil Council.
De una forma muy parecida a las bodegas del Estado, muchos de los productores y proveedores de aceite de oliva dan la bienvenida a los visitantes para realizar degustaciones y recorridos a los ranchos, molinos y tiendas de toda California. “Ofrecen más que sólo una selección diversa de aceite de oliva: son extraordinarias experiencias de aprendizaje”, dice Nancy Ash, presidente de Strictly Olive Oil, una consultoría de aceite de oliva con sede en Berkeley. “Se habla con otras personas sobre lo que se compra, y se obtienen ideas para las nuevas formas de utilizarlo en su cocina”.
Cuando pruebe el aceite de oliva, omita el pan y tome solo un pequeño sorbo de aceite. “Manténgalo en su boca por un momento, y luego, con una sonrisa, inhale aire con las esquinas de su boca”, afirma Nancy Harmon Jenkins, autora del libro Virgin Territory: Exploring the World of Olive Oil. Luego, engúllalo. Si siente un cosquilleo picante en la parte trasera de su garganta, es una señal de calidad.
Almendras, tomate y hojas de tomate son etiquetas comunes de buen aceite de oliva, afirma Jenkins, junto con fresca hierba cortada y manzanas verdes. ¿Quiere probarla usted mismo? He aquí siete destinos, enumerados de norte a sur, para probar el néctar dorado de California.
—Tina Caputo