Internándose de manera espectacular en el Pacífico azul, Point Reyes National Seashore, de más de 70,000 acres/28,732 hectáreas de extensión, parece casi desprenderse de la costa norte de California. La reserva costera, a alrededor de 30 millas/48 kilómetros al norte de San Francisco, protege más de 1,500 especies animales y vegetales, así como 80 millas/130 kilómetros de línea costera. Aquí, las olas rompen sobre playas remotas, soplos de neblina inundan las colinas costeras y los alces de Tule vagan en prados salvajes.
El principal centro para visitantes del parque, en el Valle Bear, es un lugar genial para comenzar a explorar y a los niños les encantan sus exhibiciones interactivas. Recibe actualizaciones para el avistaje de ballenas (en general de enero a mediados de abril) y sobre el despliegue de flores silvestres (a comienzos o fines de la primavera) y las condiciones del camino. Para avistar vida silvestre, diríjete a Tomales Point y podrás ver al alce de Tule, en especial durante la época de celo en otoño. Luego ve a la Laguna Abbotts, de 200 acres/81 hectáreas, para contemplar gran variedad de especies de aves (más del 45 por ciento de las especies de aves de América del Norte se han avistado en Point Reyes). Para hacer caminatas por la playa, recorre la Kehoe Beach, donde está permitido pasear con perros, la Great Beach, de 11 millas/18 km de largo, o la íntima McClures Beach. Para hacer un ejercicio que vale la pena, baja los 308 escalones (y sí, deberás subirlos para regresar) hasta el faro de Point Reyes, que data de 1870.
Consejo de alguien que sabe: ¿quieres dormir al aire libre? Haz una reserva para armar una tienda en uno de los cuatro campamentos campestres, dos de ellos ubicados a lo largo del sendero de 17 millas/27 km sobre la costa. Los campamentos en la playa Wildcat Beach, cerca de donde rompen las olas, son particularmente inolvidables.