Esta sala cinematográfica con ornamentos asiáticos ha proyectado películas desde 1927 y aún es uno de los mejores lugares para las presentaciones en Hollywood, con luces de arco y paparazzi, y el alboroto típico de las películas. Pero es el patio delantero del TCL Chinese Theatre lo que llama más la atención: el lugar donde más de 200 celebridades han dejado las huellas de sus manos y pies en el cemento y, luego, las han firmado personalmente, en ocasiones con algún adorno especial. Marilyn Monroe dejó el sello de sus tacos altos; John Wayne se paró sobre cemento húmedo con sus botas de cowboy; y R2D2 de Star Wars dejó huella de sus ruedas.
Realice un recorrido VIP guiado para echar un vistazo a las impresionantes puertas doradas de la sala y conozca la historia del gran maestro del espectáculo Sid Grauman, dueño original de la sala. O vea una película, ya que el Chinese Theatre aún funciona como cine de estrenos.