Aventura de aprendizaje familiar

En medio del alborotado muelle 15 de San Francisco, el Exploratorium, apto para multitudes, invita a las personas a experimentar la ciencia en acción, como pararse en una nube de neblina o caminar en el Tactile Dome totalmente oscuro. Visita seis exclusivas galerías, como el área Tinkering para experimentar, donde puedes ver al personal del museo crear maravillas, pero también hacer las tuyas propias. En la galería Living Systems, mira moscas de fruta y células madre a través de un potente microscopio, o deja que los niños "pedaleen" la máquina accionada por una bicicleta al aire libre, que se parece a un juego gigante de soga para saltar. Sube las escaleras hasta la Fisher Bay Observatory Gallery para acceder a vistas increíbles de veleros, buques de carga y transbordadores, y también del cercano Bay Bridge y de las islas Treasure y Yerba Buena. Y no te pierdas el cubo de observación hecho de vidrio en la punta del muelle.

La tierra se une con el cielo en la Academia de Ciencias de California, una combinación de museo de historia nacional, planetario y acuario ubicado en el Parque Golden Gate de San Francisco. Comienza en la exhibición de selva tropical de cuatro pisos, donde verás aves que vuelan libremente, mariposas, anfibios e incluso una boa del árbol del Amazonas. Consulta el cronograma en el Planetario Morrison, que exhibe películas como Passport to the Universe y presenta imágenes del telescopio Hubble Space, en una pantalla de 22 metros de diámetro. La CAS también es un lugar fantástico para comer, desde las sopas y ensaladas caseras en The Academy Café, hasta la cerveza artesanal y los platos orgánicos autóctonos en The Terrace.

Tu primera impresión de Silicon Valley, el grupo de cerebros del norte de California al sur de la Bahía de San Francisco, puede ser, irónicamente, cuán bonito es su paisaje, gracias a sus exuberantes colinas verdes. Pero las maravillas hechas por el hombre en el Museo de la Historia de la Computación de Mountain View también captarán tu atención rápidamente. Aprende sobre el surgimiento de la computadora, los autos sin conductor y los héroes tecnológicos como Ada Lovelace, una matemática inglesa. Otra exhibición fascinante relata la historia del poco conocido Colossus: un dispositivo electrónico descifrador de códigos, desarrollado por genios e ingenieros matemáticos ingleses que ayudaron a ganar la Segunda Guerra Mundial.

En Sillicon Valley, San José, el interactivo Museo Tecnológico de Innovación (apodado The Tech) crea un divertido laboratorio y una experiencia de aprendizaje para personas curiosas de todas las edades. Juega al detective cibernético o construye tu propio robot con sensores, activadores y controladores. Visita la muestra Reboot Reality y diseña una pintura digital o sube a Birdly, el simulador de vuelo de realidad virtual. Si quieres vivir otro tipo de sensación, párate sobre la Shake Platform, que crea la sensación de los ocho niveles de terremotos.

Busca el edificio del característico color morado junto a Wozniak Way de San José (también conocido como “el Woz”), nombre que recibe por el cofundador de Apple, Steve Wozniak. Aquí, en el Museo del Descubrimiento para niños de San José , los niños reciben clases prácticas de ciencias de 150 muestras y un laboratorio en un parque exterior. Comienza visitando a Lupe, la réplica de un mamut lanudo cuyos restos fueron encontrados en Silicon Valley, luego excava en la tierra para entender de qué manera los arqueólogos buscan fósiles. En otras áreas, los niños pueden hacer trabajos artísticos, trepar árboles, hacer burbujas gigantes y bombear agua de un sistema de captación de lluvia.

Con su terreno híbrido de línea costera, bosques de secuoyas y montañas, la ciudad universitaria de Santa Cruz es un imán natural para las familias, gracias a un anticuado parque de atracciones en el paseo marítimo. Pero también es el hogar del centenario Museo de Historia Natural de Santa Cruz, justo antes de Seabright Beach. Haz una parada en la piscina táctil, donde puedes tocar plantas y animales vivos de zona intermareal, y luego visita la exhibición sobre abejas melíferas o la exhibición Ohlone, que muestra cómo era la vida en la Costa Central en el período precolonial (Extra: La entrada es gratuita para los niños).

El Acuario de la Bahía de Monterrey es un acuario de primer nivel y es una parada obligada en Monterrey, una ciudad ubicada en la Costa Central. Esta atracción está al mismo nivel que el histórico Cannery Row. Verás medusas de brillantes colores, que parecen formas de vida extraterrestre, por su hermoso brillo en el agua. Queda frente a frente con adorables nutrias marinas, y da un vistazo a los tiburones leopardos y los bancos de sardinas que nadan a través de la exhibición de bosques de algas marinas. Después de todo, con ventanas de 8,5 metros, es uno de los acuarios más altos del mundo. No te pierdas los recorridos, como el de buceo en la superficie o el de alimentación de peces tras bambalinas.

El pueblo de Salinas es una parada fascinante ya que tiene una rica historia agrícola y literaria. Comienza por recorrer el mundo del autor John Steinbeck. Puedes visitar la casa de su infancia y también el Centro Nacional Steinbeck. Incluso si los niños no tienen edad como para haber leído Viñas de Ira o De ratones y hombres, este museo interactivo les dará una vívida introducción al autor a través de películas, objetos, fragmentos de audio y actividades prácticas que ilustran cómo la población y el paisaje del valle de Salinas formó parte de las historias de estos clásicos estadounidenses. Puedes visitarlo en agosto, cuando se celebra el Festival anual Steinbeck; o en febrero, cuando se celebra el día de su cumpleaños.

La ciudad de San Juan Bautista, ubicada junto a la Carretera 101, es una excelente cápsula del tiempo gracias a su centro repleto de escaparates del Viejo Oeste. Sin embargo, la pieza central de la ciudad es la Misión de San Juan Bautista, un clásico entre las 21 misiones españolas construidas en California entre 1769 y 1834. Aprende sobre la era española y observs las interesantes características de la misión, como las huellas de animales representadas en las baldosas del piso. Dos hechos divertidos: la misión se encuentra al lado de la falla de San Andrés y apareció en la película de suspenso de Hitchcock, Vértigo.

La ciudad de Gilroy en el condado de Santa Clara se enorgullece de ser la capital mundial del ajo. Ese es un título que probablemente los niños no entiendan hasta que los lleves al parque temático Gilroy Gardens, el cual homenajea la planta junto con otros cultivos que crecen en el país agrícola de la Costa Central. Acércate y gira en los juegos temáticos de agricultura, como Artichoke Dip, Mushroom Swing y, por supuesto, Garlic Twirl. Asegúrate de mirar los 25 increíbles Circus Trees, que crecen en formas que desafían la naturaleza. Si deseas saborear más comidas con ajo, incluso en helado, ven a la ciudad en julio para el Festival del Ajo de Gilroy.

A lo largo de la Carretera 99, Fresno es el centro agrícola del Valle Central; pero también ofrece hermosos jardines, parques y el Fresno Chaffee Zoo. El zoológico cuenta con singulares entornos naturales, como African Adventure, un paisaje similar a la sabana, de 5,2 hectáreas y que alberga casi 200 especies de animales de todo el mundo, desde canguros rojos y ñus, hasta chitas y cobras reales. No te pierdas la oportunidad de que tus hijos alimenten jirafas y consulta por las experiencias tras bambalinas, como el desayuno con los rinocerontes o las sesiones de entrenamiento de leones marinos.