Excursión de tacos por el sur de California

Durante casi 100 años, el humilde taco ha capturado los corazones americanos, y muchos historiadores rastrean sus raíces en California hasta Cielito Lindo en el este de Los Ángeles. Este pequeño puesto, que abre a las 9 am, sirve tacos enrollados cubiertos en salsa de aguacate desde 1934. No ha cambiado mucho desde que Aurora Guerrero introdujo los sabores de su Zacatecas natal en Olvera Street. El negocio ahora tiene agua corriente. Durante años la familia cocinó en casa y llevó las tortillas en tranvía cada mañana. Pero los propietarios (los descendientes de Guerrero) y los sabores (muy auténtico) permanecen iguales.

Este establecimiento en Culver City ofrece platillos mexicanos al estilo californiano de mediados de siglo servidos sobre unas hojas de lechuga iceberg. Olvídate de los tacos duros; la versión de Tito´s hará que te vuelvas fanático de lo crujiente. Sáltate los tamales y burritos, y prueba directamente el taco de la casa que viene cubierto con de queso cheddar y acompañado por un tazón de salsa roja. Este restaurante está muy cerca de L.A., por lo que suele ser una parada obligatoria para los fanáticos empedernidos que van y vienen desde Los Ángeles. Y como dice la pegadiza canción del anuncio: "Lo único que supera a un taco de Tito's es otro taco de Tito's".

Prueba los clásicos platillos en El Torazo Mexican Food, dirigido por una familia, en Long Beach. Por apenas $1,99, los hambrientos comensales pueden elegir su propia carne; chorizo, barbacoa o pollo, para llenar el bien llamado taco mexicano. Prueba la barra de salsas de cortesía para realzar el sabor de tu taco con riquísimos sabores como zanahorias en rodajas, cilantro fresco, cebollas y limón. Acompleta tu comida con una bebida de tamarindo helada o una michelada servida en un tarro con borde de sal. ¿Tienes espacio para algo más? Pide las papas fritas con carne asada.

Entre las tiendas de lujo de South Coast Collection en Costa Mesa, los comensales pueden experimentar la fácil transición desde los tacos de la comida rápida a la alta cocina. En Taco María, el tres veces semifinalista al premio James Beard, Carlos Salgado, sirve joyas inspiradas como el esturión con alioli de cebolleta, repollo y uvas. Su compromiso con la perfección es profundo; incluso crea la masa en el lugar, a partir de maíz ancestral cultivado en México. Para disfrutar de una mayor variedad de los talentos de Salgado, reserva una mesa para la cena de precio fijo, donde se sirven cuatro sabrosos platos innovadores con un maridaje de vinos opcional. Fue esta comida la que inspiró al fallecido crítico gastronómico de Los Angeles Times, el increíble Jonathan Gold, a nombrar Taco María su Restaurante del Año 2018.

Irvine es el hogar de la sede central del único e inigualable Taco Bell. Observa asombrado las paredes de vidrio tras las que se inventaron platos como el Wild Naked Chicken Chalupa. Taco Bell periódicamente abre su sede central para que se puedan realizar excursiones privadas e incluso cenas en su cocina de prueba; pero como estas oportunidades son escasas y poco frecuentes, es mejor llamar con antelación. Dicho eso, cualquier persona que esté de paso puede tomarse una selfie frente al restaurante original de Taco Bell, que la empresa trasladó 72 kilómetros hasta este nuevo lugar luego de su cierre en 2015.

San Diego es más conocida por dos delicias para degustar: los crujientes tacos de pescado a la manteca y la cerveza de primer nivel. El condado tiene más microcervecerías que cualquier otro en los Estados Unidos. No es de sorprender que estas dos especialidades del sur de California sepan aún mejor combinadas. En Miramar Fish Tacos and Beer en Oceanside, acompaña tu comida estilo Baja con una cerveza local. La plaza comercial tal vez no ofrezca mucho para admirar, pero el humilde exterior oculta el delicioso oasis que hay en su interior. No te pierdas el ceviche picante, hecho cada mañana, y el camarón de piedra frito, cubierto con una fuerte salsa picante.

El platillo clásico del sur de California son estos tacos con guacamole; crujientes, un poco grasosos y cubiertos de gloriosos vegetales. El patio de Roberto’s Mexican Food, en Del Mar, es el lugar perfecto para probar este platillo. El legado de Roberto comenzó en 1964 cuando la familia de Roberto Robledo abrió un negocio de venta de tortillas. La base era muy sabrosa, los lugareños pedían los rellenos y el resto es historia de San Diego. Si has probado demasiadas delicias rellenas de carne molida, baja la comida con una caminata por la Reserva Natural Estatal Torrey Pines a pocos kilómetros de allí.

Disfruta de una celebridad de los golpes en el destacado Lucha Libre Gourmet Taco Shop en el barrio Mission Hills de San Diego o en uno de los dos puestos en North Park y Carlsbad (alrededor de 56 km al norte del centro). Sea cual sea la lucha que elijas, tendrá un excelente y abrumador espectáculo. En el espíritu de la "lucha libre" mexicana, las paredes están pintadas con colores fluorescentes y metálicos, y el menú es atrevido con platos temáticos de lucha libre. Piensa en el delicioso taco de mariscos (camarón o mahi carbonizado) o en las papitas Knockout (cubiertas de pollo o filete, tocino, queso fundido y más). Entra a la cabina de los campeones, acabada con tapizado dorado brillante y sogas de terciopelo, y no te olvides de tu máscara de lucha mexicana. Obtendrás un descuento por usarla mientras haces tu pedido.

En Tacos El Gordo puedes probar auténticos platillos cerca de la frontera con México (existen tres locales en California en el sur del condado de San Diego, incluidos dos en Chula Vista). La adobada (cerdo especiado) es algo de otro mundo. Pero, sabiendo que en El Gordo todos los tacos son perfectamente balanceados y frescos, ¿por qué no salir de la zona de confort de tus papilas gustativas? Prueba el estómago de cerdo cremoso, las sabrosas tripas o la deliciosa lengua. Todos los tacos se sirven acompañados con guarniciones brillantes como cebollas asadas a la parrilla y jalapeños picantes, y van acompañados de salsas dinamita que se preparan diariamente.